Me gustas cuando dices tonterías,
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.
Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo, o cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.
Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, llena de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:
«Tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno».
LUIS ALBERTO DE CUENCA
ENVÍO : Con todo el amor del Mundo, a la persona con la que quiero seguir
compartiendo hasta el último desayuno de mi vida.¡Te quiero!,¡felicidades!.
Me gustan los desayunos, los almuerzos, las meriendas y las cenas contigo porque, lo que más me gusta del mundo, es pasar la vida junto a ti. Te quiero y felicIdades también para ti.
ResponderEliminarAmigo, creo que sé a quién le dedicas esta entrada (¿te ha contestado, verdad?; pero si a mi me dices esas cosas, te invito a un desayuno con una buena tostá de pringá donde tu digas, (a hacer puñetas el poquito de colesterol)
ResponderEliminarUn abrazo y felicidades a los dos.
Pues claro que esta dedicado a Ella, amigo Naranjito.Este ventanal esta lleno de guiños, de referencias, de piropos para Ella, ¿para quien si no?.En cuanto a lo de la tostá yo la prefiero con jamón, y la pringa con un puchero, si no te importa.Un fuerte abrazo.
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