LUIS CERNUDA LEYENDO |
En el cementerio-jardín de la ciudad de Mejico, reposan los restos de uno de los más grandes poetas sevillanos de la generación del 27, el poeta que en la distancia le canto a Sevilla, el poeta de la realidad y el deseo LUIS CERNUDA.
Nacido en la céntrica calle de ACETRES, en el seno de una familia acomodada, su padre era militar de graduación, por lo que gozaban de una muy buena posición tanto social como económica.
Muy pronto, se despertó en el muchacho un gran amor por la literatura, en especial por la poesía, dicen que uno de los primeros libros que leyó, fueron "LAS RIMAS" de BECQUER.
Su segunda etapa sevillana se desarrolla en la calle AIRE, estudia la carrera de Derecho y decide dedicarse totalmente a la poesía, pese a la oposición paterna que había pensado para él un futuro en la carrera castrense.
Su sensibilidad especial, su tendencia homosexual, muchos años reprimida para evitar rencillas familiares, al final chocaron con la moral puritana e intransigente de la época, y LUIS CERNUDA como antes BLANCO WHITE o ANTONIO MACHADO, tuvo que abandonar la ciudad que no perdonaba a aquellos que eran distintos en pensamiento o condición sexual, la SEVILLA DE ARQUEROS FINOS lo vio partir para siempre cuando el poeta contaba veinticuatro años de edad.
A partir de ese momento comienza un largo peregrinar por distintas ciudades del Mundo; Málaga, Madrid, donde entra en contacto con otros grandes poetas de su generación: LORCA, ALBERTI, ALTOLAGUIRRE, GERARDO DIEGO, para después marchar definitivamente al extranjero, Inglaterra, Escocia, en GLASGOW, una ciudad de espesas nieblas, escribió su libro en prosa "OCNOS", donde nos relata melancólico y nostálgico, las vivencias y recuerdos de su infancia en Sevilla.
DÍA DE PLAYA CON MANUEL ALTOLAGUIRRE |
La ultima etapa de su vida seria América donde pasaría sus últimos años. "PERFIL DEL AIRE", "LA REALIDAD Y EL DESEO", su mejor obra en poesía y "OCNOS", conforman, sin duda, lo más selecto de la bibliografía de este poeta al que Sevilla, como a tantos otros hijos, arrinconó en el olvido durante muchos años, hasta que ya en nuestros días, se le reconoció el prestigio que, con justicia, siempre se mereció.
LUIS CERNUDA nos dijo en "OCNOS": "Hay destinos humanos que están ligados a un lugar o a un paisaje", su destino le empujo a estar errante, añorando en la distancia a Sevilla, a la ciudad que pese a ser ingrata, ser Madrastra, como tantas veces, él en cualquier lugar siempre amo.
AZULEJO EN LA CALLE ACETRES DONDE NACIÓ |
¡Qué bonito homenaje a Cernuda!
ResponderEliminarConfieso que no he leido mucho de él, hace muchos años, leí algunas cosas, pero....poco.
Prometo buscar y leer algo de él. Saludos.
Hola tortuguita, me alegra que te halla gustado, si quieres leer algo de poesía de Cernuda todo es bueno, pero yo te recomendaría el libro "OCNOS", tiene una prosa poética preciosa.Un fuerte beso
ResponderEliminarCernuda nunca extrañó Sevilla. Infórmense como es debido... aunque bueno, la foto de la playa es buenísima. ¡Un saludo!
ResponderEliminarSiento diferir de su comentario amigo anónimo, al menos para mi , cada capitulo de "OCNOS", escrito en una ciudad tan, tan distinta de SEVILLA como es, y supongo que sería GLASGOW, es un canto a la nostalgía, a los años vividos en rincones y lugares que se perdieron pero que se quieren en el fondo del alma, no hay más que leer JARDIN ANTIGUO, el texto del azulejo de la calle ACETRES.Gracias por asomarte a SOÑANDOSEVILLA. Un abrazo
EliminarYa cuando abandonó Sevilla dijo que "estaba harto de su ciudad nativa", aparte de no agradarle demasiado España en sí.
ResponderEliminarTambién dijo, ante la errónea interpretación de Quisiera estar solo en el sur (sacado del título de una canción de jazz), que no sentía nostalgia por Andalucía, aunque sea éste anterior.
A mi parecer, Cernuda, al contrario que otros poetas que por desgracia también tuvieron que exiliarse, no lamentó demasiado la patria perdida.
Yo lo de Ocnos lo interpretaría más bien como nostalgia por la infancia, por la inocencia, pero no por Sevilla en sí.
Un blog muy bueno (lo digo con criterio porque también soy de Sevilla, jajaja).