martes, 9 de noviembre de 2021

CARMEN LAFFÓN - ADIÓS A LA ARTISTA-PUENTE.

 


             Porque que no conozcan a JUANA DE AIZPURU o PABLO DEL BARCO , PASA ; que no conozcan la obra de CRISTINA GALEOTE o JAVIER FITO , PASA.

                Que no sepan quién era CARMEN LAFFÓN, NO PASA.

               Todo joven sevillano entre los  DOCE y los TREINTAICINCO años, todo aquel que , tenga la edad que tenga, se precie de sevillanía, de amar a nuestra ciudad, ya sea un joven MIARMA, costalero o músico, entregado cofrade y amante de las más rancias costumbres, o sea un moderno,un vanguardista, CULTURETA  y BOHEMIO , pájaro nocturno en las juergas de la ALAMEDA , debería conocer a  CARMEN LAFFÓN.             

     En la madrugada del Domingo pasado nos dejó , para seguir acariciando con sus pinceles  un lugar seguro que más sereno, más sencillamente hermoso que este LOCO MUNDO en que vivimos , nuestra mejor pintora, la maravillosa CARMEN LAFFÓN

    La primera obra que me maravillo de esta gran pintora es,sin duda, la más conocida por la mayoría de sevillanos,  el cartel de la Semana Santa de 1,983  donde, casi nos hacía intuir, más que ver, el frontal del respiradero de su vecina de barrio, la VIRGEN DE LA CANDELARIA , ya que CARMEN LAFFÓN vivía en la calle VÍRGENES, a muy pocos metros de la Parroquia de SAN NICOLÁS.

 Después, durante muchos años, muchas más obras me fueron atrapando, cautivando.Como las que pude contemplar en las exposiciones del CAAC en en Monasterio de la CARTUJA, esos grandes oleos de parajes limpios, frescos, libres de la mano, tantas veces dañina, del hombre.

                Paisajes tan, tan nuestros, tan andaluces,  donde la inmensidad se hacía en un fluir suave de LUZ, en un horizonte donde en mágico abrazo de celestes, de blancos,  casi con unos líneas, nos mostraba su amor por la desembocadura de nuestro río, el GUADALQUIVIR , su pasión por DOÑANA, siempre, siempre vista desde SANLUCAR, su segundo hogar.



            También esos cuadros donde nos enseñaba su  visión mágica, como si voláramos soñando, de la mejor SEVILLA, atrapados desde el mirador privilegiado de la orilla de  TRIANA ; sus bodegones, sui generis,  como guiños de sencillos trazos a la modernidad, a las vanguardias, como si una de sus instalaciones quedara atrapada con sus óleos en la quietud del lienzo, y como no,  su cartel para la hermandad de la MACARENA donde se aparece como una ensoñación, visión celestial entre verdes de OJEDA, la belleza infinitamente dulce y serena de la ESPERANZA.
 


     Hasta llegar al último descubrimiento, esas montañas blancas, esas pirámides de SAL, donde perdemos la vista, casi sin poder distinguir el cielo  y el  mar de los grandes montículos de las SALINAS DE BONANZA,  buscando como dijo un crítico, la belleza de un "NO PAISAJE" , como último homenajea a su hogar SANLUQUEÑO

      CARMEN LAFFÓN dijo en una de sus pocas apariciones en público, era muy poco amante de las EXPOSICIONES,le gustaba que solo hablara su obra:  “El Guadalquivir es el río de Sevilla, mi ciudad de nacimiento, que me lleva a Sanlúcar de Barrameda, mi otra ciudad, donde comencé a pintar y a soñar”.

       Al igual que el viejo río BETIS, CARMEN LAFFÓN, nuestra más importante pintora,  nuestra artista-puente entre los pintores clásicos sevillanos, entre los costumbristas y los más osados rupturistas, en una ciudad tan, tan conservadora para el ARTE,  de las últimas vanguardias; la mujer sencilla que recibió innumerables premios por la extraordinaria calidad de su obra, entre otros,  creo que sería uno de los más apreciados por ella, el de HIJA PREDILECTA DE ANDALUCÍA, nació en SEVILLA, para ir, mansamente a morir, a su amada SANLÚCAR.

     Descanse en la PAZ del SEÑOR, CARMEN LAFFÓN.Como homenaje póstumo de inmensa admiración, tomo los versos que nuestro común paisano, su amigo JACOBO CORTINES le dedicó.

             ¡Cómo amaste ese río y sus orillas,  

             sus aguas fango rosa, o barro, o piata.

             Cómo supiste ver ya cauce adentro

             ese blancor de las salinas frías, 

             el silencio de la marisma oscura, 

             la paz de esos remansos de sauces y de mimbres,

             y llegar a Sevilla y descifrarla con su torre dorada 

             como eje y el perfil de la esbelta en el celaje! 

             Sanlúcar y Sevilla, una morada,

             un espacio interior para adentrarse 

             en el ser de las cosas y salvarlo 

             del olvido tenaz y su silencio.

             Plantaste allí tu viña, que cultivas año tras año

             con amor constante. 

             Vendimias ya su fruto y lo transformas

             no en el dorado vino de la tierra, 

             sino en otro más dulce para el alma,

             ansiosa de verdad y de belleza.


           SONIDO DE FONDO: CARMEN LAFFÓN era hermana de la HDAD. DE LA CANDELARIA , por eso, en su recuerdo, CANDELARIA, marcha procesional de MANUEL MARVIZÓN.

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